Artur Bordalo el Junk Artist del momento

Siempre me ha parecido interesante la forma en la que piensa un artista urbano, la sensibilidad y la crítica con la que observan la realidad, cada uno analizando lo que ve según su experiencia, logrando que las imágenes no sean igual para todos.

Específicamente en temas de contaminación ambiental, y esa necesidad de cada uno por proteger el planeta en beneficio de las generaciones futuras, llega a nuestras vidas el trabajo del portugués Artur Bordalo, mejor conocido como Bordalo II.

Nacido en Lisboa en el año 1987, desde pequeño vio cómo el trabajo de su abuelo, el pintor Real Bordalo, era perseguido por la sociedad y poco apreciado por las personas, que pensaban que el uso de acuarelas y pinturas eran actos ilegales. Pero para él, era un motivo de orgullo, pertenecer a una familia de artistas veían el mundo de una manera diferente, algo que marcaría sus próximos días.

Una frase budista que me gusta mucho es “Tu trabajo es descubrir tu trabajo y después entregarte a él con todo tu corazón” y me gusta por dos cosas, la primera es que pocas personas tienen el privilegio de dedicarse a lo que les gusta hacer realmente, y la segunda es que cuando eso sucede, el éxito es una serie de consecuencias que te perseguirán toda la vida.

Bordalo es un claro ejemplo, ya que actualmente dedica su vida a crear obras de arte llenas de movimiento, color y vida. Donde collages con objetos recogidos de la basura, residuos abandonados y un poco de spray, dan vitalidad a calles de diferentes ciudades en su natal Portugal, haciendo una crítica al mundo consumista en el que vivimos y haciendo un poco de reflexión acerca de lo que le estamos haciendo al planeta tierra. Su obra es descrita como “collages de objetos” repartiendo 10 animales gigantes y 100 más pequeños creados sobre lienzos.

Y es que seguramente te preguntarás, ¿qué tiene de extraordinario su trabajo?, pues aunque el tirar la basura sea el proceso más mágico de todos, ya que en cuestión de segundos desaparecerán nuestros desperdicios sin mayor problema, hay alguien que no está de acuerdo y ha decidido ayudar al ambiente realizando algo diferente.

Algunas de las cosas que a Bordalo le avergüenzan, es pertenecer a una generación consumista, materialista y sumamente interesada, en donde las personas han caído en un mundo en donde el consumo exagerado ha hecho que la basura sea cada vez mayor.

Su metodología de trabajo consiste en llegar a lugares abandonados con uno o dos bocetos preparados, en donde a lo largo de varios años ha plasmado imágenes de animales como peces, loros, saltamontes, abejas y algunos vehículos en perspectiva, visiones ambientales de una ciudad y escenas deconstruidas.

La escultura “Ojos del búho” fue armada a partir de neumáticos de tractor, chapa ondulada, y otros trozos de chatarra y basura urbana.  Así que la próxima vez que oigas la campana del camión de la basura pasar por tu casa, no olvides que la basura de un hombre, puede ser el tesoro de otro. 😉