Alex Jenkin y sus ilustraciones ácidas

Escrito por: H34dBanG17

24 octubre, 2017

Cultura

Siempre, toda manifestación de arte conlleva un cumulo de sentimientos, de sensaciones. En esta ocasión podemos desmenuzar el trabajo de este artista londinense que está provocando gran revuelo con su trabajo el cual lo han considerado como perturbador, surrealista y en algunos casos tenebroso, y no tiene que ver con que sea dark su onda, sino por la forma en que sus ilustraciones están moviendo las células de los espectadores.

Alex Jenkins es un ilustrador originario de los suburbios del sur de Londres. Graduado en el Colegio de Artes de Camberwell. Jenkins describe su trabajo como una manera de “explorar la sátira y la crítica a través de un estilo distintivo y ácido.” Este trabajo está figurando entre lo absurdo, lo surreal y el humor de la vida actual, la cual retrata desde su visión donde el consumismo y pasividad de la sociedad se encuentran actualmente.

Esta versión moderna del Bosco, es uno de los ahora aclamados ilustradores han logrado despertar los instintos más bajos de los espectadores, que han vivido entre el morbo y el arte de una forma con lo que explica: “Siempre me gusta jugar con los elementos humorísticos, porque te puedes relacionar con ellos y sirven para balancear la ilustración si trata sobre un tema muy oscuro o macabro”.

La cotidianidad es uno de los temas con los que podemos reflejar el trabajo de Jenkins, el cual ha mudado el lado más obscuro del público en cada ilustración, la mediocridad, los detalles de horror que nosotros sabemos que existen y son, pero que negamos por el hecho de decir que las cosas están bien, son esos motores con los que este ilustrador ha plasmado su obra, la cual ha logrado mostrarse en las más prestigiosas publicaciones a nivel mundial.

Aunque muchos lo toman como un personaje mórbido en la ilustración, otros lo tiene en un punto de avance, donde vemos una ilustración muy movida, sacada de un contexto donde los colores chillantes y las formas recortadas son piezas clave de este mecanismo de protesta que Alex ha provocado en los últimos dos años.