Una de las historias más controversiales en el mundo ha sido la vida de la familia imperial Rusa, considerada entre la grandeza y la excentricidad, nos han regalado a la cultura actual grandes tesoros y relatos que siguen maravillando al mundo.
Entre sus miles de historias podemos encontrar una de las más reconocidas y valiosas en el mundo, donde el ingenio, el poder y sobre todo lo ostentoso se unen para crear las maravillas del mundo moderno, que al día de hoy sigue sorprendiendo.
Los tesoros adornados con diamantes, rubíes, joyas y oro, dados como un pequeño presente, estamos hablando de los enaltecidos huevos de Pascua de los zares de Rusia, que mostraban la elegancia y el ingenio que este imperio europeo demostró.
Arte creado por el joyero y empresario Carl Fabergé, considerado uno de los artífices más destacados del mundo, realizó 69 huevos de Pascua entre los años 1885 a 1917 por órdenes del Zar Alejandro III quien solicitó un regalo digno de su reina, la emperatriz María Fiódorovna.
Platino, plata, cobre, níquel, paladio, acero fueron combinados con el fin de conseguir diferentes colores para la cáscara del huevo que era adornado de joyas y con cada entrega se realizaba un diseño original que denotaba alguna momento de la vida del Zar o un recuerdo de la infancia.
Los huevos de Fabergé siempre contenían una sorpresa. Buscaba representar los colores de la naturaleza simulando flores, plantas, insectos y pájaros siempre con el estilo típico de esa época. El ingenio de todos los modelos mostraban un reto que para Fabergé fue un trabajo que lo catapulto como un gran artista de las joyas.
De los aproximadamente 60 huevos hechos para la familia imperial entre 1885 y 1916, 52 han sobrevivido y otros se encuentran desaparecidos, aunque algunos mencionan que siguen en el mercado negro de arte y llegan a tener un costo de 20 millones de dólares.
Existen registros de estos huevos alrededor del mundo, dado que después de la revolución Rusa, fueron robados algunos o vendidos a millonarios. Uno de los lugares donde se pueden encontrar algunas piezas son Francia, Londres, Moscú y Alemania, este último fueron robados por el imperio Nazi en la segunda guerra mundial, el cual se le mencionó que traficaban con este arte con comerciantes internacionales. La última vez que estos huevos fueron puestos en venta fue en el 2014 con una venta de 9 de estos artículos por la suma de 100 millones de dólares.
