El Parque Cuitláhuac, un nuevo Chapultepec construido con basura reciclada en Iztapalapa

Escrito por: Equipo editorial

3 noviembre, 2020

Ciudad

El Bosque de Chapultepec tendrá un refuerzo como pulmón de la Ciudad de México, ya que pronto Iztapalapa tendrá su propio bosque urbano. Se trata del Parque Cuitláhuac, un nuevo bosque construido sobre lo que fue un vertedero de basura.

El Parque Cuitláhuac pasará a ser el segundo más grande de la capital mexicana, contará con 145 hectáreas y está proyectado para recibir a visitantes de todas partes de la megalópolis. Sin embargo, hay que decirlo, los principales beneficiados serán los 2 millones de habitantes de la alcaldía. El Parque Cuitláhuac se encuentra dividido por el Eje 6 Sur en dos secciones, que juntas representan la cuarta parte del Bosque de Chapultepec.

De 1948 a 1982 fungió como un tiradero con montañas de desechos de hasta 100 metros de altura, luego de lo cual fue transformado en un relleno sanitario. Durante las administraciones pasadas hubo varios intentos por convertir el que fuera el basurero más grande del Distrito Federal en un parque urbano, pero la tecnología no daba para reparar el suelo dañado.

No fue sino hasta febrero de 2019 que Claudia Sheinbaum, actual jefa de gobierno, anunciara la inversión de 250 millones de pesos en este proyecto. Para la ingeniería se han juntado más de dos centenares de especialistas y académicos.

En su primera etapa, el Parque Ecológico Cuitláhuac contempla la construcción de un parque acuático, un área de juegos infantiles, go-karts, espacio escultórico, lago artificial, zona para mascotas, anfiteatro, torre mirador y el skatepark más grande del planeta. Se calcula que para el primer trimestre de 2020 la primera etapa sea concluida. En cuanto a la segunda y tercera etapa, su inauguración está planeada en 2021 y 2022 respectivamente.

Otra de las características más sobresalientes de este proyecto es que está construido con basura. Así como lo oyes, la construcción del parque se está haciendo con las botellas y el cascajo encontrado en el tiradero.

Dichos materiales serán la base geológica del parque, con lo cual se evitará que el parque se inunde o se hunda. Gracias a la base de cascajo y PET, el agua se mantendrá en las capaz vegetales superiores, además evitará la filtración de gases de basura. En cuanto a las zonas no vegetales, también contarán con piso adoquines de cascajo y PET. Cada metro cuadrado del material contiene 200 botellas y resiste 250 kilogramos.

Otra de las principales dificultades para proyectar un parque en este tipo de terrenos, es la difícil supervivencia de la flora en el lugar. Tras diversos estudios, se concluyó introducir 44 mil especies de plantas aptas para este terreno contaminado. En masa se sembrarán eucaliptos y casuarinas que se tima crecerán más de 10 metros en los próximos 5 años.

En cuanto al sistema hidráulico, el Parque Cuitláhuac contará con un canal de captación de lluvias y aguas residuales que contará con una capa impermeable en el fondo para evitar el escurrimiento hacia el subsuelo. Para el tratamiento de las aguas, el canal será dotado de especies vegetales que se alimenten de los componentes orgánicas a fin de transformarlas en aguas de riego.

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