La Cumbrecita, un pueblo único en su clase

Escrito por: H34dBanG17

19 julio, 2017

Viajes

Europa sin salir de América. Es la frase que más se menciona cuando te vas acercando a este maravilloso y pequeño pueblo ubicado en el Valle de Calamuchita en las Sierras Grandes de la Provincia de Córdoba, Argentina.

Su apariencia del pasado, entendiera que te confunde de época, manteniendo un aire muy a los años 40s gracias a su pintoresca arquitectura que impacta al ojo con los detalles más rústicos al estilo alemán.

A esto se suma el sereno, saludable y frondoso escenario de las sierras de la provincia de Córdoba, en el centro de Argentina, pintan a su alrededor, del considerado el único pueblo peatonal del mundo.

La cumbrecita cuenta con una población de menos de mil habitantes y en su mayoría son las últimas generaciones de descendencia alemana, la cual llegó a fundar este poblado después de la Segunda Guerra Mundial.

En 1934, Helmut Cabjolsky, un alemán radicado en Buenos Aires, compró 500 hectáreas en estas sierras cordobesas buscando un lugar para salir del caos citadino y acercarse a la naturaleza. Entre su trabajo fue la construcción y planeación del pueblo.

Su apariencia clásica no se encuentra peleada con las nuevas tecnologías y más cuando se habla de ayudar al medio ambiente. La cumbrecita además de ser un pueblo donde el uso de automóviles es casi nulo, es también una comunidad  que se abastecen de energías renovables.

Una planta de tratamiento de agua, así como sistemas para recoger el agua en pozos y en el Río Almbach. Los plásticos, vidrios y metales se reciclan en una planta a pocos kilómetros y los desechos orgánicos se utilizan para composta en la zona, técnica que todos en el poblado conocen.

Algunos atractivos turísticos de La Cumbrecita son las cascadas de la zona, el antiguo cementerio, que desde su inicio fue planteado como un bello parque con frondosa arboleda, y su rio subterráneo. Un lugar único que no debes dejar pasar y que muestra que el pasado y el futuro pueden convivir.