Para los rusos, sumergirte en agua helada te ayuda a sobrevivir

Si piensas que no hay nada más frío que el corazón de tu ex, estás equivocado, debes saber que Rusia es más helado que cualquier relación que hayas pasado y que probablemente no aguantarías las tremendas heladas que se desatan en el país europeo en los últimos meses del año.

Pero hay un remedio que parece una locura para un ser que vive en un país caribeño, los habitantes de esa región del planeta suelen meterse en agua fría para combatir las intensas heladas y las bajas temperaturas. ¿Estás mal de la cabeza? Al parecer, no.

Por ejemplo, en la región siberiana de Krasnoyarsk, antes de ir al colegio, los niños de aproximadamente cuatro años se mojan con cubos de agua helada para no coger frío en el duro invierno y soportar las temperaturas extremas que siempre rondan debajo de 0 centígrados.

Algunos usan agua helada a temperaturas de 18 grados bajo cero en lugar de cubos de hielo. Esta técnica popular tiene como objetivo combatir la gripe y los resfriados, ya que reactivan el sistema inmunológico y los hace más resistentes para evitar futuras enfermedades.

Una profesora de la región, Yevguenia Vasétskaya, cree que este método afecta a la actitud mental y el nivel de energía de los pequeños, ya que los menores “disfrutan de un estilo de vida saludable y tienen la sensación positiva de hacer deporte y echarse agua encima”.

Según un estudio, efectivamente, esta técnica siberiana ha disminuido la incidencia de resfriados y la gripe entre los niños siberianos.

Cada 19 de enero se conmemora en Rusia un rito cristiano del bautismo que deja helado a cualquiera. Con el termómetro por debajo de los 20 grados bajo cero, los creyentes ortodoxos se sumergen en las aguas heladas de ríos y lagos para ser expiados de todos los pecados que cometieron en el año.

Pero esto no lo practican unos cuantos, sino miles de rusos que se zambullen en las gélidas aguas de lagos y ríos por todo el país. La creencia es que el acto, cura enfermedades o demuestra la valentía con ocasión de la Festividad del Bautismo de Cristo.

“Me siento renacida, con salud para todo el año”, dijo Simona Ralev, una moscovita recién salida de un agujero del río helado a 12 grados centígrados bajo cero.

Tan sólo en la capital rusa, unos 70 mil valientes toman parte en la fiesta de la Epifanía… ¿Te atreverías a echarte un chapuzón en aguas heladas rusas?