¿NETA? ¿Los veganos también matan animales?

Escrito por: yessicavhh@gmail.com

20 febrero, 2018

Estilo de vida

El ser vegano en los últimos años, más que un capricho se ha convertido en un estilo de vida para cientos de personas a nivel mundial. En ocasiones sin importarles mucho su salud, de la  noche a la mañana deciden eliminar completamente de su dieta todo alimento que tenga que ver con animales.
Argumentando que para ellos es más importante que se respete la vida de seres indefensos, sacrificados cruelmente para nuestro consumo, que su propio bienestar.

Sin ser egoísta y como médico que soy, podría decirte que aunque son muchos los beneficios que esta forma de vida pudiera traer a tu cuerpo, también tengo que confesarte, que en diferentes ocasiones, ha sido la causa de que algunos pacientes lleguen muy graves al servicio de urgencias, debido a las irresponsables alteraciones a su dieta sin antes haber consultado a un especialista.
No estoy satanizando ninguna decisión, tan solo te recomiendo que antes de elegir cualquier modificación que pueda hacer cambios bruscos a tu cuerpo, consultes un médico. Y no me vayas a decir, que no tienes dinero para hacerlo, ya que por si no lo sabías, la vida que comenzaras a llevar no te saldrá nada barata. Ya que los restaurantes veganos en nuestro país son muy caros y difíciles de encontrar.
Ya sea por decisión propia, o por la cantidad de videos que PETA, se encarga de publicar constantemente, las personas ven que el dejar de comer animales domésticos como cerdo, vaca, gallinas, etcétera, será una manera de evitar que estos animales sufran, y puedan vivir en paz con el ambiente.

Si visitas la página oficial, de la asociación PETA, (Personas por el trato ético a los animales) seguramente podrás observar una leyenda con el siguiente mensaje:
“LOS ANIMALES NO SON NUESTROS PARA COMER, VESTIR, EXPERIMENTAR, USAR COMO ENTRETENIMIENTO O MALTRATAR DE NINGUNA FORMA.”

¿Pero en verdad, este tipo de decisión, ayuda a que los animales dejen de morir?

Tal vez no directamente, pero hace poco un artículo publicado por el ambientólogo Claudio Bertonatti, que tituló: “LA CONFUSIÓN DEL VEGANISMO”, y con él una bomba atómica estalló. ¿Por qué? ¿Qué que decía?

Pues prácticamente que el consumir vegetales, no evitaba la muerte de los animales, sino todo lo contrario. Por lo que cientos de veganos, asociaciones civiles y algunos profesionales en pro del ambiente, se mantuvieron indignados con sus declaraciones. A tal grado de poner a pensar a cientos de personas, que defendían el veganismo, como la única alternativa en contra de la matanza animal. Pero es más que obvio, que puso a pensar a más de uno con sus declaraciones.
Resumiendo un poco su texto, el doctor Claudio nos cuenta que cuando era un adolescente empezó a estudiar la naturaleza y la fauna, y se dio cuenta que en los cultivos agrícolas no había aves, y que las pocas que había estaban perseguidas. Entonces prefirió estudiar anfibios, mamíferos, reptiles y peces.
Pensaba que al ser vegetariano evitaba la muerte y el sufrimiento de los animales domésticos, pero no la de las especies silvestres. Y muchas de estas, a diferencia de las vacas, los cerdos y las cabras, estaban desapareciendo. Entonces cambió, y se dejó de pensamientos extraños y volvió a ser omnívoro.
En su idea principal nos cuenta que aunque los humanos empezamos a criar ganado y adoptamos la agricultura, generamos impactos. No hay especie animal que no mate o no coma mediante la muerte de otros animales, directa o indirectamente. Y aunque a todos nos gustaría vivir en un mundo ideal la realidad siempre será otra. Muy cruda para ser sinceros.
La mayoría de los veganos piensan que no causan ninguna muerte, pero la realidad es que sí lo hacen. En la vida real jamás será posible el impacto cero.
Trigo, arroz, maíz. La mayoría de los veganos los comen. El primer impacto de los cultivos masivos es la deforestación: desalojamos a la naturaleza para plantar.  Luego hay que defender la siembra de las aves que vienen a hurgar, por lo que muchos propietarios distribuyen granos envenenados. Después, los herbívoros silvestres van a ir a por los primeros brotes: se ponen entonces alambradas eléctricas, o directamente se cazan a tiros.

Se fumiga para combatir hongos, insectos, otras plantas. Las animales que expulsaste van a ir a los lugares vecinos, donde ya hay animales: no hay más plazas de hotel. Entonces van a los cultivos vecinos, y se produce otra ola de impactos.

SI COMES CARNE MATAS ANIMALES, Y SI COMES PLANTAS TAMBIÉN.
 Mucha gente que se preocupa por temas ambientales busca los buenos y los malos, y no es así, todo es más complejo.
La mayoría de las personas vivimos en ciudades, y muchas desconocen el mundo natural. Si no conocemos la naturaleza, su diversidad, tampoco podemos valorarla. Nuestro universo se restringe a lo que vemos: perros, gatos, canarios, gallinas, cerdos, patos, vacas. Nuestra sensibilidad se dirige a ellos, y es como mirar a través del agujero de una cerradura. El mundo es más amplio y más complejo, puedes aceptarlo o no.
Aunque casi nunca los vemos luchando por la creación de nuevos espacios protegidos, o combatiendo el tráfico ilegal de especies. Las corridas de toros o los mataderos. El veganismo va más allá.
“YO NO DIGO QUE LOS VEGANOS SEAN TONTOS NI QUE HAYA QUE SER CARNÍVORO, DIGO QUE HAY QUE SER NORMAL Y SOLIDARIO, ADOPTAR UNA POSICIÓN INTELIGENTE. SER SOLIDARIO CON LA NATURALEZA, EL MAL MENOR. HAY QUE FOMENTAR EL CONSUMO RESPONSABLE Y LA MUERTE HUMANITARIA DE LAS RESES. NO HACE FALTA SER VEGANO PARA CONSERVAR LA NATURALEZA O LA BIODIVERSIDAD” Claudio Bertonatti