Mitos y realidades sobre el consumo de la lactosa

Si la última vez que consumiste leche, fue aquella cuando tu mamá te cargaba entre su regazo y eras un bebé, tal vez este articulo pueda ser para ti, ya que desgraciadamente existen millones de mitos acerca de lactosa (azúcar presente en la leche de los mamíferos) y por la cual personas dejan de tomarla, eliminándola de su dieta de forma radical.

“La leche sólo la deben consumir los niños.”
Mito; ya que gracias a sus propiedades los lácteos están considerados como alimentos funcionales durante todo el ciclo de vida de las personas, ocupando un lugar esencial en la nutrición humana.

“La leche causa alergias”
Realidad; ya que las alergias alimentarias son causadas por una respuesta inmune anormal a la ingesta de proteínas específicas, que podría ser la leche. Aunque también es importante señalar que la incidencia es muy baja ya que solo el 1% la presenta y desaparece inmediatamente después de que el sistema gastrointestinal madura.

“Los intolerantes a la lactosa no pueden consumir ningún tipo de lácteo.”
Mito; ya que en la actualidad existe una gran gama de opciones con productos deslactosados y, así que no es necesario eliminar el consumo de leche, la recomendación es experimentar poco a poco con cantidades pequeñas y productos diferentes.

“Los lácteos ocasionan que subas de peso con facilidad.”
Mito; Estudios científicos nos dicen que las proteínas de la leche ayudan a la reducción del peso y el calcio a la disminución de la grasa corporal. Así que el consumo de leche suprime la ingesta de alimentos al incrementar la saciedad. Es imposible que un producto ocasione obesidad, ya que es el resultado de la falta de actividad física y malos hábitos alimenticios.

“Consumir lácteos causa cáncer.”
Mito; La leche y los productos lácteos contienen grandes cantidades de antioxidantes, promoviendo así la regeneración celular. Además de que el calcio y la Vitamina D, en conjunto con sus componentes ácidos lácticos y linoleicos tienen un efecto protector contra el cáncer de colon, próstata y mamá.

Así que no olvides que siempre será mejor brindar con un rico y nutritivo vaso de leche, que con alcohol que solo daña tu salud.