¿Qué son los cables submarinos?

Internet, bendito internet, cuantas veces no hemos sufrido con la señal de nuestra red en casa o en la oficina, moviendo el modem, levantándolo, apagándolo, poniéndole veladora para que no se apague en el momento de enviar el trabajo final de la escuela. Pero alguna vez te has puesto a pensar ¿cómo llega el internet a tu casa?

Tal vez piensas que el internet llega gracias a la ondas de viento que hay y no vemos en nuestro espacio, gracias al avance de Wi-Fi y esto nos permite ver nuestras series de Netflix, pero ¿qué pasaría si te dijera que no y que todo es gracias a un mar de cables que atraviesan todo el mundo?

Suena algo muy descabellado, pero es la realidad. Miles de kilómetros de cables submarinos de fibra óptica que están instalados a lo largo de los océanos son los que garantizan una mejora en los servicios de telecomunicaciones a nivel global.

Increíble verdad, es que uno en este tiempo pensaría que todo sería gracias a las formas inalámbricas, pero la verdad es otra. Alrededor de 1 millón de kilómetros de cable recorre el mar de todo el mundo, permitiendo viajar alrededor de 600 Terabits de información por segundo.

El 1852 se instaló el primer cable de cobre que conectaba el Reino Unido y Francia bajo el Canal de la Mancha. El primer cable de fibra óptica se instaló en 1990, también a través del Canal de la Mancha, posteriormente se hizo con el resto de mares europeos. El primer cable de fibra óptica transatlántico no llegó hasta 1997.

En el caso de México, nuestro país cuenta con una de las redes de fibra óptica submarina más importante de América latina, permitiendo conexión con países como Argentina, Brazil, Chile y Colombia, los cables en las costas mexicanas son la conexión entre Europa y Asia con todo el continente.

De la misma forma que llega a pasar con todos los cables, estos no son infalibles. Los tiburones u otros animales a veces han causado desperfectos en los mismos. Las anclas de los barcos enganchados en los cables e incluso los cambios en las placas tectónicas son algunos de los retos que esta gran red de comunicación se enfrenta.

Los cables submarinos se mantienen gracias a las alianzas de los sectores público-privadas. Que fortalecen la infraestructura tecnológica; y la empresa privada -es decir, los operadores- ha destinado inversiones cuantiosas para mejorar cada día la calidad del servicio de internet.

Así que la próxima vez que no sirva tu internet, te recomiendo que revises los cables de tu modem y no busques señal levantando tu dispositivo como si fueras Rafiki con Simba en el Rey León.

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