El mítico Batcave club de UK, cuna de la cultura gótica

Escrito por: H34dBanG17

24 julio, 2017

Cultura

La historia del rock está plagada de grande momentos y lugares que han marcado el rumbo de los géneros. Grandes artistas han dado sus pasos en estos lugares que al día de hoy siguen reflejando el espíritu de la música.

Lugares como el CBGB en New York con el punk rock, la Cavern en Londres con los Beatles o el Whisky a GoGo en Los Ángeles y el movimiento del glam. Cada uno de estos lugares vio crecer a lo que serían las leyendas de cada género y el gótico no se queda atrás.

La cueva de los vampiros, mejor conocida como The Batcave Club, fue uno de los parteaguas del género gótico a nivel mundial, lugar que le dio pertenencia a estos personajes que parecían sacados de la novel a de Bram Stoker.

Este club abrió sus puertas en julio de 1982 ubicada en Meard Street en el barrio del Soho, Londres.  La iniciativa por parte de  Ollie Wisdom, cantante de la banda de post-punk, Specimen,; dirigió el club con la ayuda Hugh Jones, productor de bandas como The Charlatans y The Bluetones.

El Batcave fue el centro de la floreciente escena del rock gótico de 1982 a 1986 y le dio un lugar emblemático a este género donde el uso de negro, estoperoles y las figuras andróginas se mostraban con naturalidad.

Espacio adornado en todas las características de una fiesta de Halloween: telas de araña, ataúdes envueltos de basura  se unían con cada uno de los comensales, los cuales destellaban con las luces del lugar que hacían denotar su maquillaje que contrastaba con su ropa negra.

Personalidades como Robert Smith de The Cure, la cantante Siouxsie Sioux, el productor Marc Almond, Sexs Pistols, New Order o Nick Cave fueron parte de este legado musical que al día de hoy sigue representando el lado más alternativo de la música.

Post-punk, psicodelia, New Wave y varios Djs sonaban en este pequeño espacio que albergó grandes momentos del gótico, un lugar relativamente pequeño con un aforo de 300 personas, dejó su huella e inspiró a grandes bandas que al día de hoy siguen creando música. Un documental, una marca de ropa y hasta un sello discográfico son parte del legado de este lugar emblemático para el rock.